Ya llevo algún tiempo creando fantasías siguiendo las indicaciones de mi
Amo. No solo se trata de fantasear, sino que a partir de ellas le ofrezca el
placer que mi Amo se merece.
Aunque las elaboro con ganas e ilusión, empezarlas nunca me es fácil. Me
resulta difícil ponerme en la piel de otra persona, pero lo que realmente me
resulta más difícil es ser severa con las sumisas o esclavas imaginarias. Son personajes
creados en mi mente, no existen y sé que no les estoy haciendo daño. Pero al
principio me resulta difícil, poco a poco, cuando voy liberándome de los miedos
sale de mi interior la capacidad de ser severa o de intentar representar el
papel de sumisa severa.
En definitiva difícil de empezar, pero después disfruto escribiendo. Aunque
si me guio por los comentarios de mi Amo, los relatos son buenos y le gustan. Pero…
¿Qué opináis vosotros? Me gustaría mucho saberlo.
ARGUMENTO: Tengo que ayudar a escoger a seis candidatas para el evento que está
organizando mi Amo. Después de una curada elección entre distintas candidatas, elijo
a seis. Después el test practico.
FICHAS PARTICIPANTES
NOMBRE BDSM:
|
Afrodita
|
PROFESSIÓN:
|
Peluquera
|
||||
EDAD:
|
25
|
SUMISA
|
ESCLAVA
|
||||
AMOS:
|
No
|
EXPERIENCIA:
|
Novata
|
||||
TE PRESENTAS:
|
LIBRE
|
ENVIADA POR TU AMO
|
|||||
ZONAS VIRGENES:
|
BOCA
|
COÑO
|
CULO
|
NINGUNA
|
|||
ZONA AZOTAR:
|
TETAS
|
COÑO
|
CULO
|
ESPALDA
|
|||
EXP. LLUVIAS:
|
NO
|
SI
|
CUALES:
|
|
|||
EXP. CERA:
|
NINGUNA
|
DEPILACIÓN:
|
ENTERA
|
NOMBRE BDSM:
|
Mala
|
PROFESSIÓN:
|
Dependienta
|
||||
EDAD:
|
18
|
SUMISA
|
ESCLAVA
|
||||
AMOS:
|
1
|
EXPERIENCIA:
|
MEDIA
|
||||
TE PRESENTAS:
|
LIBRE
|
ENVIADA POR TU AMO
|
|||||
ZONAS VIRGENES:
|
BOCA
|
COÑO
|
CULO
|
NINGUNA
|
|||
ZONA AZOTAR:
|
TETAS
|
COÑO
|
CULO
|
ESPALDA
|
|||
EXP. LLUVIAS:
|
NO
|
SI
|
CUALES:
|
AMARILLA
BLANCA
|
|||
EXP. CERA:
|
ALTA
|
DEPILACIÓN:
|
ENTERA
|
NOMBRE BDSM:
|
Elsa
|
PROFESSIÓN:
|
Administrativa
|
||||
EDAD:
|
30
|
SUMISA
|
ESCLAVA
|
||||
AMOS:
|
2
|
EXPERIENCIA:
|
ALTA
|
||||
TE PRESENTAS:
|
LIBRE
|
ENVIADA POR TU AMO
|
|||||
ZONAS VIRGENES:
|
BOCA
|
COÑO
|
CULO
|
NINGUNA
|
|||
ZONA AZOTAR:
|
TETAS
|
COÑO
|
CULO
|
ESPALDA
|
|||
EXP. LLUVIAS:
|
NO
|
SI
|
CUALES:
|
AMARILLA
BLANCA
|
|||
EXP. CERA:
|
BAJA
|
DEPILACIÓN:
|
BRASILEÑA
|
||||
NOMBRE BDSM:
|
Arandel
|
PROFESSIÓN:
|
Estudiante
|
||||
EDAD:
|
23
|
SUMISA
|
ESCLAVA
|
||||
AMOS:
|
1
|
EXPERIENCIA:
|
BAJA
|
||||
TE PRESENTAS:
|
LIBRE
|
ENVIADA POR TU AMO
|
|||||
ZONAS VIRGENES:
|
BOCA
|
COÑO
|
CULO
|
NINGUNA
|
|||
ZONA AZOTAR:
|
TETAS
|
COÑO
|
CULO
|
ESPALDA
|
|||
EXP. LLUVIAS:
|
NO
|
SI
|
CUALES:
|
|
|||
EXP. CERA:
|
NULA
|
DEPILACIÓN:
|
EN FORMA DE FLECHA
|
NOMBRE BDSM:
|
Saphira
|
PROFESSIÓN:
|
Actriz
|
||||
EDAD:
|
35
|
SUMISA
|
ESCLAVA
|
||||
AMOS:
|
3
|
EXPERIENCIA:
|
ALTA
|
||||
TE PRESENTAS:
|
LIBRE
|
ENVIADA POR TU AMO
|
|||||
ZONAS VIRGENES:
|
BOCA
|
COÑO
|
CULO
|
NINGUNA
|
|||
ZONA AZOTAR:
|
TETAS
|
COÑO
|
CULO
|
ESPALDA
|
|||
EXP. LLUVIAS:
|
NO
|
SI
|
CUALES:
|
TODAS
|
|||
EXP. CERA:
|
ALTA
|
DEPILACIÓN:
|
EUROPEA
|
NOMBRE BDSM:
|
Arya
|
PROFESSIÓN:
|
Enfermera
|
||||
EDAD:
|
20
|
SUMISA
|
ESCLAVA
|
||||
AMOS:
|
0
|
EXPERIENCIA:
|
NOVATA
|
||||
TE PRESENTAS:
|
LIBRE
|
ENVIADA POR TU AMO
|
|||||
ZONAS VIRGENES:
|
BOCA
|
COÑO
|
CULO
|
NINGUNA
|
|||
ZONA AZOTAR:
|
TETAS
|
COÑO
|
CULO
|
ESPALDA
|
|||
EXP. LLUVIAS:
|
NO
|
SI
|
CUALES:
|
|
|||
EXP. CERA:
|
NULA
|
DEPILACIÓN:
|
NATURAL
|
TEST PRÁCTICO
Después de una larga tría entra varias inspirantes que se presentaban para
la nueva venta que está organizando el Amo de Belladona, ha elegido a seis de
entre 25 aspirantes. Pero sabe que no las puede dar por buenas hasta que hayan
pasado por el test práctico, y que por supuesto es responsabilidad de
belladona. Su Amo le mando que crease el test práctico. No le fue fácil, pero
al final, después de pensar, elaborar, borrar y volver a empezar, consiguió un
gran resultado y así se lo confirmo su Amo. Finalmente el test quedo de la
siguiente forma:
NOMBRE ASPIRANTE
|
|
|
TETAS
|
Tolerancia
azotes
|
|
Tolerancia
pellizcos
|
|
|
Resistencia
pinzas
|
|
|
COÑO
|
Tolerancia
3 azotes
|
SUAVE:
MEDIO:
INTENSO:
|
Comprobación
humedad
|
|
|
Observación
clítoris
|
|
|
CULO
|
Tolerancia
4 azotes
|
SAUVE:
MEDIO:
FUERTE:
INTENSO:
|
Numero
de dedos en ano
|
|
|
ESPALDA
|
Tolerancia
5 azotes
|
|
BOCA
|
Comprobación
técnica
|
|
ORDENES
|
Reacción
a ellas
|
|
VALORACIÓN FINAL
|
|
Belladona, se enfrenta a algo nuevo, hasta ahora nunca se había enfrentado
a algo así. Esta nerviosa. Entre las seis inspirantes y ella simplemente, hay una
pequeña puerta. Ellas charlan tranquilamente, mientras intenta calmarse
respirando profundamente. Es muy consciente que tiene que hacerlo bien. No solo
por ella misma sino también para que su Amo ofrezca las mejores mercancías en
la venta que está organizando. Si él se siente orgulloso de su trabajo belladona
saldrá ganado, pero si él no se siente orgulloso será severamente castigada. Y
eso no es algo que no quiere ni él ni ella.
Belladona mira fijamente a la puerta, coge aire profundamente y…
-
Que
entre la primera. – dice lo más severa posible. No es su papel, no está
acostumbrada a dar órdenes, pero debe de aparentar seria, segura y severa.
La puerta se abre lentamente, y entra la primera seleccionada. Es guapa,
alta, delgada, pelo largo y rubia. Va vestida con un corto vestido de látex con
unas botas altas de tacón. Levanta la cabeza y…
-
Buenos
días soy…
-
Cállate
– dice severamente, no se siento cómoda pero debe de ser severa, su próximo Amo
lo será más que ella – nadie te ha dado permiso para hablar. Así que no abras
la boca hasta nueva orden. ¿Lo has entendido?
Asiente con la cabeza. Belladona le indica que se sienta y empieza a leerle
su ficha. Ella no dice nada, solo mantiene la cabeza gacha, esa es una buena
postura.
-
Muy
bien afrodita. Vamos a empezar con el test práctico. Eso no será fácil para ti.
Pero para llegar a la subasta debes de pasar por él.
Inspirando confianza y seguridad, empieza a contarle en qué consistirá el
test práctico y entre las dos acuerdan una palabra de seguridad por si en algún
momento del test Afrodita no puede más y necesita parar. ROJO, será la palabra.
Pero no sin antes escuchar la explicación de que no siempre se le hará caso
cuando la diga, pero que ella lo intentara, a no ser que se considere que sea
capaz de aguantar.
-
Levántate
y desnúdate. Después colócate allí.
Ella se levanta sin rechistar, cabizbaja, va hacia el rincón establecido y
empieza a desnudarse lentamente, con vergüenza. Belladona espera, pero al final
se da cuenta de que ella no debe de esperar, afrodita debe apresurarse. Y así se
lo hace saber.
-
Más
rápido nena, no tenemos todo el día y tengo mucho que hacer. Ya sabes que no
puedes correrte en ningún momento del test. Si eso pasa me veré obligada a
castigarte duramente y no dejarte participar en el evento.
Ella se apresura y cumple la orden a raja tabla. Belladona anota algo en el
cuestionario. Se siente observada, sabe de dónde procede, al igual que sabe que
se está preguntando que he anotado, lo sabe porque es lo que pensaría e
intentaría averiguar ella. Pero no flaquea. Empieza andar en círculos a su
alrededor, la va mirando y a la vez mediando su espera, su paciencia y su
tolerancia. Reacciona bien, no se impacienta. Esa es muy buena señal. Pasado un
rato se para frente a ella, lleva en la mano la cola de gato, afrodita sabe lo
que pasará porque se lo han explicado. Belladona se siente insegura y con
miedo, agarra con fuerza el gato y sin
ningún tipo de duda… ¡zas! ¡Zas! Cuatro veces en total, dos y dos. Son azotes
fuertes, que le han marcado bien las tetas, están rojas. Y anota.
No hay tiempo que perder, deja el gato. Dirige sus manos a los pezones. Los
agarra entre sus dedos y empieza a pellizcar y retorcer mientras la mira
fijamente para ver como lo tolera. Belladona presiona, cada vez más fuerte, con
más intensidad, intentando hacer lo que su Amo le hace a ella. Sabe que debe
presionar y actuar hasta que empiece
hacer mohines, a quejarse, a mostrar dolor en su rostro, en sus suspiros, en su
respiración. Y sigue, ella aguanta, pero belladona empieza a flaquera, a perder
confianza. Si esta resistiendo tanto puede ser porque no aprieta lo suficiente.
Así que ni corta ni perezosa… saca todas sus fuerzas y aprieta más hasta que…afrodita
se queja. Para y anota.
-
Bien,
muy bien nena. Masajéate la zona para relajar mientras voy a buscar los
siguientes instrumentos.
-
Si
Señora.
Sonríe, suena raro. ¿Señora? ¿Ella? Es raro y la hace sentirse superior.
Cierra la puerta detrás de ella con un portazo. Le deja un ligero tiempo, sabe
perfectamente cómo puede quedar esta zona después de un largo periodo de
tortura, al igual que sabe qué si tiene la zona sensible y no se relaja la
resistencia a la pinzas será baja. Aún así, decide que en lugar de seguir con
los pezones, proseguirá con la otra zona, de esta forma ganaran tiempo.
-
Túmbate
en la camilla boca arriba y abre las piernas. Exponente bien.
Tiene la pala en la mano, mira a un punto fijo de la habitación, levanta la
mano y… ¡zas! Primer azote suave. Espera y observa su reacción. Parece que no
se inmuta. ¿Demasiado suave? Se lo anota mentalmente para que con la siguiente
inspirante el azote suave sea un poco más intenso. ¡Zas! Segundo azote medio.
Se le escapa un grito suave. Le ha dolido. Anota. Para y respira profundamente,
la mano empieza a dolerle de lo fuerte que agarra la pala. La mueve, la masajea
y vuelve a agarrar con fuerza la pala. Coge aire profundamente y… ¡Zas! Tercer
y último azote. Un azote intenso, muy intenso. Empieza a llorar. Anota.
Afrodita muestra señales de dolor, pero belladona duda, no sabe si realmente ha
azotado con intensidad, con la que azotaran los Amos. Por regla general ellos
tienen más fuerza, pero a la vez se dice que si afrodita resiste su intensidad,
es la suficiente como para pasar a la venta. Aún no ha terminado el test y si
es comprada su nuevo propietario ya la pondrá a su altura.
-
Lo
estás haciendo bien nena, no te rindas. Aguanta. ¿Quieres seguir?
-
Sí,
Señora. Prosigue.
Necesita soporte positivo, sino se rendirá y de momento es una muy buena
candidata. Puede que parezca que haya flaqueado, pero también es necesario
mimar un poco. Ella está llorando, sus lágrimas decoran su cara y sin que se dé
cuenta le cuela dos dedos en su interior, se le escapa un pequeño gemido. Está
húmeda, muy húmeda. Señal de que disfruta con el dolor y será una esclava que
entregue mucha cantidad de placer.
-
Mmm…
bonito clítoris puta. Grande y muy florecido. Vamos a ver como esta de
sensible.
Sin decirle nada, belladona se acerca a ella y de repente le coloca una
pinza en cada pezón. Evidentemente, no se lo esperaba y se le escapa una
pequeña queja de dolor. No puede dejar de preguntarse si aguantara. No le dice
nada, ella sabe lo que debe hacer si no puede más. Pero para distraerla
terminará con la exploración del coño, le queda el clítoris. Empieza a
soplarle, ella se sobresalta, pero no para y le dedica tiempo. El cuerpo va
reaccionando. Empieza a moverse, buscando fricción. Señal que necesita
explotar.
-
Ni se
te ocurra putita. No me obligues a descartarte. ¿Lo has entendido? – no dice
nada – contesta puta, te he hecho una pregunta.
-
Si,
Señora, lo he entendido.
-
Ah y
no me digas Señora. No soy tu señora. Solo di si o de acuerdo. ¿Entendido?
Puedes contestar.
-
Entendido.
Está en su punto flaco, pero la exploración no puede parar, así que le pasa
la punta del dedo suavemente, arriba y abajo. Pequeños círculos. Pequeños
golpecitos. Se va tensando. Quiere saber hasta dónde es capaz de llegar.
-
Di tu
palabra de seguridad cuando estés al abismo del orgasmo.
-
De
acuerdo.
Así que belladona continua con las caricias, con los golpecitos y los
pellizcos. Gime, cada vez más acelerada. Y cuando estos son más rápidos…
-
Rojo.
Para. Es la señal acordada. Y evidentemente anota. Lleva un muy buen rato
con las pinzas puestas. Es el momento de saber cuánto puede aguantar ahora que
no tiene otro lugar en que centrar su mente. Belladona acerca una silla, la
plata a su lado, se sienta y empieza a mirarla fijamente. Sabe lo incomodo que
puede llegar a ser esta situación. Porque por mucho que lo quieras controlar
llega el momento en que tu mente empieza a ir más rápido, empiezas a ponerte
nerviosa y quieres decir algo. Entonces empieza la lucha entre decir algo o
callar. Y belladona quiere observar cuanto tiempo tarda en llegar a este punto.
Si, puede ser un pulso entre dos personas, pero solo una puede ganar y evidentemente
será la que manda. Lleva puestas las pinzas unos diez minutos. Pero ahora es
cuando empieza lo de verdad, ahora que la sangre no tiene otro lugar donde
concentrarse. En breve, empezaran los primeros síntomas. Y como belladona
esperaba, así es. Su respiración se ralentiza, se hace más profunda. Sus manos
empiezan a agitarse. Decide no esperar más, se levanta lentamente, se acerca a
afrodita y le saca la primera pinza.
-
Ufff…gracias
– dice afrodita.
A continuación, le saca la segunda y en esta ocasión se le dibuja una
pequeña sonrisa de satisfacción, cree que no la ha visto. Afrodita se siente
liberada y es en este mismo instante cuando sus lágrimas se intensifican y
empieza a llorar. Llora de liberación y agradecimiento.
-
Date
la vuelta. Y muéstrame tu culo.
Su culo es grande y respingón. A simple vista es bonito. Esta chica será un
buen lote, tiene el cuerpo perfecto y de momento el test lo está pasando con
mucha satisfacción. Y belladona aplica los procedimientos anteriores, primero
azotes y luego dedos. Vuelve a coger la pala. Ya no duda tanto, cada vez se
siente más segura y así lo demuestra con los cuatro azotes que le ha dado.
Cuatro azotes que siguen la misma tónica que en la zona anterior, suave, medio,
fuerte e intenso. Realizar los dos primero azotes le es más fácil que nos dos
últimos. Porque pone todo su empeño, saca toda la fuerza que tiene en su
interior y sabe que han sido más fuertes que en la primera zona porque esta vez
la esclava ha mostrado más señales de dolor que antes. Mismo procedimiento.
Azote, pausa, observación y anotación. Y por fin llega aquel momento que más
sufría belladona. No le es muy agradable, pero debe hacerlo. Se coloca un
guante de látex, como si fuera una segunda piel. Se lubrica el guante. Y…
empieza a introducir el primer dedo.
-
Rojo.
– chilla afrodita.
Paro. Es virgen en esta zona y no será ella quien le rompa el culo.
-
Pone
de pie, de cara aquella pared, pon las manos en ella. Ya estamos terminando
puta.
En esta ocasión vuelve a tener la cola de gato en sus manos. Esta zona le
es más fácil de azotar, levanta el brazo y… ¡zas! ¡Zas! ¡Zas! Ya así hasta
cinco ocasiones. Sabe que son fuertes porque resuenan en toda la habitación. Y
porque el gato deja roja la zona. Pero no solo por eso, porque con cada azote
ella gime y se queja ligeramente. Es como si quisiera decir algo, pero sabe que
no puede decir nada.
-
Muéstrame
lo que sabes hacer – le dice mientras le alarga un consolador en forma de
polla.
No se mueve, es como si no supiera lo que tiene que hacer, o como si
tuviera vergüenza. Belladona empieza a impacientarse.
-
Venga
niña, a qué esperas, no tengo todo el día. Muéstrame lo que sabes hacer, ya.
Es ahora cuando reacciona tímidamente y empieza a actuar. La mira, la
observa. Anota.
-
Muy
bien. Vístete. Ya te llamaremos. Gracias.
-
A ti.
Belladona sale de la habitación con el formulario en la mano. Pasa por
delante de las otras candidatas y entra en un pequeño despacho. Cierra la
puerta. Se sienta en una mesa, vuelve a leer lo que ha escrito, recuerda la
pequeña sesión vivida. Coge el bolígrafo y en apartado de valoración final
anota… apta. Esta feliz, ya tiene la primera aspirante y es una gran mercancía.
De momento todo va sobre ruedas.
Ahora solo desea que las cinco que le quedan sean igual de buenas que la
primera. Bebe un poco de agua, sale del despacho, entra en la sala y la
encuentra ordenada, buena chica afrodita, piensa. Respira profundamente, mira
fijamente la puerta. Alza un poco la voz.
-
Que
entre la siguiente.
La puerta se abre. Muy bien, vamos allá. Tiene que ser un poco más rápida.
Con la primera ha perdido un poco demasiado de tiempo. Ahora ya sabe lo que
debe y como hacer. Ya se siente un poco más segura de ella misma.
NOMBRE ASPIRANTE
|
Afrodita
|
|
TETAS
|
Tolerancia azotes
|
alta
|
Tolerancia pellizcos
|
Media
|
|
Resistencia pinzas
|
Media
|
|
COÑO
|
Tolerancia 3 azotes
|
SUAVE: alto
MEDIO: medio
INTENSO: bajo
|
Comprobación humedad
|
Muy humedecida. Segregación
alta de fluidos.
|
|
Observación clítoris
|
Grande. Sensibilidad media.
Capacidad retención orgasmo alta.
|
|
CULO
|
Tolerancia 4 azotes
|
SAUVE: alto
MEDIO: alto
FUERTE: bajo
INTENSO: bajo
|
Numero de dedos en ano
|
Ninguno.
|
|
ESPALDA
|
Tolerancia 5 azotes
|
alta
|
BOCA
|
Comprobación técnica
|
A mejorar
|
ORDENES
|
Reacción a ellas
|
Buena. Cumple a raja tabla
|
RESULTADO FINAL
|
APTA
|
Y entra ella, la segunda. Según su ficha aunque su experiencia no es alta,
ya pertenece a un Amo y puede deducir que la envía para que adquiera más
experiencia. Es un recurso con el que cuentan varios Amos. Su indumentaria no
sorprende a belladona. Se presenta semidesnuda, solo con un tanguita y unos
zapatos de tacón.
-
Túmbate.
No hace falta que te cuente nada, supongo que ya sabes cómo funciona. Así que
vamos allá.
-
Cómo
tú mandes.
-
Túmbate
allí, sabes que no puedes correrte a lo largo del test. Si en algún momento
quieres parar o estas en el abismo del orgasmo di ROJO. No puedes decir nada,
salvo que yo te pregunte o te ordene. ¿Entendido?
-
Entendido.
No hace falta que le diga nada más. Se levanta, se despoja del tanga y va
hacia la camilla. Se tumba.
Esta vez, belladona decide empezar por las pinzas. De esta forma mientras
las lleva puesta proseguirá con la exploración del coño y así después seguirá
con las tetas y por supuesto gana tiempo. Así que sin decir ninguna palabra va
en busca de las pinzas, le coloca una y luego otra. Mala no reacciona, ni se
inmuta.
-
Bien,
voy a proseguir con el coño. Así que muéstrate.
-
Pero
no terminas…
-
Nadie
te ha dado permiso para opinar. Calla y cumple.
Rechista un poco pero termina obedeciendo. Eso no es buena señal, tendrá
que seguir observando a ver cómo reacciona a las siguientes órdenes, puede que
sea por eso por lo que la envía su Amo. Así que sin decir anda más, belladona
levanta la mano con la pala en la mano y sin ningún tipo de duda… ¡zas! Primer
azote suave, al estilo de su Amo. Rechista un poco, buena señal, este ha sido
de la suavidad adecuada, pero lo ha aguantado bien. Belladona anota. Acto
seguido, vuelve a levantar la mano y ¡Zas! Azote medio. Reacción positiva.
Acompañada de un suave gritito y movimiento involuntario de cerrar las piernas.
-
Abre
coño.
-
Es
que duele – empieza a llorar – no puedo más…
-
Si
vuelves a hablar te castigare severamente.
Belladona vuelve a levantar la mano es el turno del ultimo azote y cuando
está a punto de empezar a bajar la mano con fuerza…
-
ROJO,
ROJO, ROJO. PARA – chilla desconsolada.
-
De
acuerdo. Vamos a proseguir.
Deja la fusta a un lado de la camilla. Debe de conseguir su respeto. No le
parece una buena candidata por el momento, aunque tampoco es mala candidata, ya
que da pie a que un buen Amo severo la ponga en su sitio. No espera a que se
calme, simplemente le introduce tres dedos en su coño y comprueba que aunque la
tolerancia al dolor no es muy alta, su cuerpo reacciona muy favorablemente. No
se para y empieza a jugar con su clítoris. Siguiendo el mismo protocolo de
antes. Le sopla suavemente, de menos a más. Y lo acompaña con caricias con la
yema del dedo. Movimientos agiles de arriba abajo, jugando con el clítoris,
dándole golpecitos suaves y seguidos. Dibujando pequeños círculos, de lentos a
rápidos. Quiere llevarla al límite. Y parece que es capaz de aguantar y
resistir muy bien. Su clítoris es muy apetecible, aunque es pequeño reacciona
muy bien a las caricias y hace que su cuerpo se estremezca y mucho. Sigue
jugando, la sigue provocando, empieza a tensarse, señal inequívoca.
-
Rojo.
Bien, muy bien, belladona está satisfecha. Respira profundamente, se dirige
a su lado y con poco cuidado le saca las pinzas.
-
Au.
-
Date
la vuelta.
Esta vez obedece sin rechistar, belladona sonríe feliz, parece que va
evolucionando favorablemente. Pero debe de seguir siendo severa si no quiere
que ella se confié. Vuelve a coger la pala. ¡Zas! Azote suave. Y esta vez es
suave porque queda poca marca. No le da tiempo a relajarse. ¡Zas! Azote medio.
No se mueve, no rechista. Buena chica. Continua, tiene buen ritmo y no lo
quiere perder. ¡Zas! Este ha sido fuerte, la ha marcado bien marcada y ella no
ha podido evitar chillar. Pero lo ha aguantado bien. En realidad muy bien.
Mala sabe que el siguiente ser muy fuerte, será intenso. Belladona se
prepara, levanta la mano pero no puede llegar a azotar porque aparta el culo.
-
Estate
quieta. No lo estropees.
Belladona se vuelve a preparar y reza para que no se vuelva a apartar. Y…
¡Zas! Ella no se queja pero sabe que lo podría haber hecho perfectamente,
porque le ha dolida a ella también. Le masaje un poco la zona para que se
relaje. Después se coloca un guante y con la otra le sigue masajeando la zona y
va observando como el ano se va abriendo. Según su ficha ya tiene experiencia,
así que no duda y le introduce el primer dedo. Ella no se queja. Así que
belladona sigue adelante y le introduce otro dedo. Lleva dos dentro y mala no
se queja. Así que decide penetrar dos dedos manos. Con el cuarto mala empieza a
quejarse y belladona decide sacarlo y dejar solo tres. Estos los aguanta bien,
los tolera y busca el roce.
-
Quietecita
monada. – le saca los tres dedos de golpe. – levántate.
Ella obedece y mira fijamente a los ojos de belladona. No sabe que
esperarse, porque tiene la fusta en la mano pero la ha dejado caer en el suelo.
Se acerca y agarra los pezones de mala entre sus dedeos. Los pellizca de forma
progresiva, de suave a muy fuerte, esa es la idea. Quiere saber cuál es la
tolerancia de ella. Y no es muy buena. Porque se queda en la tercera presión.
En la intensa/baja.
-
Recoge
la pala puta.
Le aguanta la mirada, la está mediando. Pero belladona no le dice nada,
solo le mantiene la mirada hasta que ella se ablanda y obedece. Se la coge de
la mano y la azota cuatro veces, dos y dos. De la misma intensidad, alta y sin
pausas. No se queja.
-
Bien,
date la vuelta y pon las manos en la pared.
Empiezo a azotar sin prisa pero sin pausa. Intensamente, lo que cree que
puede resistir y no se equivoca. Los aguanta muy bien. Hay zonas a mejorar pero
otras que las tiene muy dominadas. Acto seguido agarra el consolador en forma
de polla.
-
Demuéstrame
tus habilidades.
Se da la vuelta, coge el consolador y sin ninguna pizca de duda se entrega
a ella. Poco a poco se la va introduciendo toda en la boca. Tiene una boca
grande, le cabe entera. Le dedica tiempo, se nota que disfruta y que le dedica
mucho. Esa es una gran forma de dar placer a su Amo y eso es lo que acaba de
convencer a belladona de que si no hay ningún contra tiempo, será apta.
-
Muchas
gracias. Ya puedes vestirte y recoger. Límpialo todo muy bien.
-
De
acuerdo.
Belladona sale de la habitación y se va a su despacho a recapacitar. A
tomar la decisión final.
NOMBRE ASPIRANTE
|
Mala
|
|
TETAS
|
Tolerancia azotes
|
Alta
|
Tolerancia pellizcos
|
Media
|
|
Resistencia pinzas
|
Baja/media
|
|
COÑO
|
Tolerancia 3 azotes
|
SUAVE: alta
MEDIO: baja
INTENSO:
nulo
|
Comprobación humedad
|
Chorreando.
|
|
Observación clítoris
|
Pequeño.
Sensibilidad alta. Capacidad alargar el orgasmo a mejorar.
|
|
CULO
|
Tolerancia 4 azotes
|
SAUVE: alta
MEDIO: alta
FUERTE: alta
INTENSO:
media
|
Numero de dedos en ano
|
Tres
|
|
ESPALDA
|
Tolerancia 5 azotes
|
Alta
|
BOCA
|
Comprobación técnica
|
Muy
buena.
|
ORDENES
|
Reacción a ellas
|
A
mejorar. Evoluciona favorablemente a lo largo de la sesión.
|
VALORACIÓN FINAL
|
Apta/ acabar de decidir.
|
Ya ha explorado a dos de las seis candidatas elegidas. De momento solo
tiene una en duda, pero aún no está todo dicho y sí se diera el caso tiene a
otra a la retaguardia. Ya se siente más segura de sí misma, empieza a dominar
la situación y a sentirse más cómoda. Es hora de proseguir con la siguiente.
Es el turno de Elsa, una esclava con mucha experiencia según su ficha, sin
Amo que presenta libremente, eso solo puede significar que va en busca de un
nuevo propietario y por lo tanto tendré que exigirle mucho, para comprobar si
su experiencia es totalmente cierta.
-
Adelante,
que entre la siguiente.
Y allí entra ella, alta, delgada, morena rubia, vestida con un vestidito
corto transparenta que deja entrever sus intimidades, ya que no lleva ropa
interior. El conjunto lo complementa con un antifaz y uno zapatos de tacón.
Entra mirando al suelo, se coloca al centro de la habitación y sin que le diga
nada se arrodilla y espera. Bonita postura, piensa belladona. Buena actitud.
-
Según
tu ficha tu experiencia es alta, por lo tanto ya sabes cómo funciona. Sabes
perfectamente que no puedes hablar a no ser que se te pregunte directamente.
Para cualquier cosa, tu palabra de seguridad es rojo. ¿Entendido?
-
Entendido.
-
Pues
vamos allá. Levántate, desnúdate y ponte de espaldas frente a la pared con las
manos en ella. Y no me hagas esperar mucho que no tengo todo el día.
Se levanta rápidamente, se apresura a quitarse la ropa y se dirige
rápidamente al lugar indicado. Mientras ella se mueve belladona aprovecha para
observarla y darse cuenta que frente a ella tiene una escultura, un cuerpo muy
bonito, con bonitas formas. Decide que la hará esperar un poco, para poner a
prueba su paciencia. Lentamente se va acercando mientras coge las pinzas.
-
Ofréceme
tus pechos, putita.
Elsa se gira, se coge los pechos con las manos y se los ofrece, buena
actitud, belladona se queda sin palabras, tendrá que aprender de ella. Se dice
a sí misma. Y sin mediar ninguna palabra más le coloca con seguridad y fuerza
una pinza en cada pezón. Ni se inmuta. Es como si no llevara nada en ellos. Se
gira y dirigiéndose al test…
-
Date
la vuelta, ya.
No pierde ni un segundo, agarra con fuerza la cola de gato y cuando se
dirige hacia ella, cambia de opinión y decide coger la fusta. Cambia de
instrumento, será más severa, quiere comprobar ella misma si realmente tiene
experiencia alta. Levanta la mano y… ¡zas!
-
Uno.
Se sorprende, porque ella no le ha dicho nada, pero es lo que se espera
generalmente. No le dice nada. Vuelve a levantar la mano y… ¡zas! Elsa vuelve a
contar, y no se mueve ni un pelo, aguanta como una campeona. Sabe que está
azotando fuerte, lo sabe porque le duele el brazo. Respira profundamente y…
¡zas!
-
Tres.
– coge aire, ¡zas! – cuatro – chilla. ¡zas! -
cinco.
Su respiración es agitada, los dos últimos le han dolido pero no lo perece.
Es como si no hubiera pasado nada de nada. Se aleja de ella, guarda la fusta en
el cajón, no la volverá a utilizar, ya ha comprobado lo que quería y ha quedado
satisfecha.
-
Demuéstrame
lo que sabes hacer.
Elsa se gira, coge el consolador y empieza a mostrarle sus habilidades para
comerse una polla. Son buenas, empieza despacio y sin prisa. A belladona le
gusta lo que está viendo, definitivamente parece buena.
-
Muy
bien, gracias. Límpialo y recuéstate en la mesa. Seguiremos con el culo. ¿Cómo
van las pinzas?
-
Muy
bien, gracias por preguntar.
-
De
acuerdo, voy a seguir. Recuerda, en cualquier momento…rojo.
Lleva un buen rato con ellas, al menos unos diez minutos y parece que no le
duelen. Esta vez tiene en la mano la pala, sabe lo que tiene que hacer pero se
siente un poco mal por lo que ha hecho anteriormente. No quiere que se note.
Así que levanta la mano y empieza con los cuatro azotes establecidos. El suave,
espera, observa y anota. El medio, pausa, sigue el mismo protocolo. El fuerte,
pausa, observa, quiere tocar, no lo hace, anota. Finalmente, el intenso. Muy buena tolerancia.
Su respiración es un poco más agitada. Pero resiste y ella no se rinde. Coge el
guante, lo lubrica e introduce el primer dedo lentamente, quiere saber cómo lo
vive. Elsa se pone nerviosa, su respiración es más rápida acompañada de
pequeños gemidos. Abre la boca, como si quisiera decir algo. Belladona no le da
tiempo, saca el primer dedo y acto seguido penetra dos, esta vez con un poco
más de brusquedad. Gime descontroladamente, le gusta y quiere más. Ella sabe
muy bien lo que debe hacer, al igual que belladona. Saca los dos dedos bruscamente
e introduce tres con mucha calma, poco a poco. Escuchando las reacciones de Elsa
y sobretodo observando. Dicho esto, se da cuenta que se tensa y eso complica la
penetración. Continua penetrando haciendo ligeros círculos, como a ella le
gusta. Casi están dentro…
-
Rojo.
-
¿Qué
te duele, culo o pinzas?
-
Culo.
-
De
acuerdo, los voy a sacar lentamente y tú me ayudaras, seguro que sabes cómo
hacerlo. Vamos allá. Despacio.
Llevan ya media hora, está sorprendida por la resistencia de las pinzas. Se
quita el guante. La deja respirar y calmarse mientras anota en el test lo que
opina. Mientras decide que no quiere quedarse estancada en el tiempo, ya le ha
quedado claro la capacidad de resistir las pinzas, es hora de sacarlas.
-
Estoy
gratamente sorprendida, quítate las pinzas, déjalas en la mesa y túmbate en la
camilla.
No hace falta decirle nada más. Se tumba boca arriba, hace caras de
quejarse, normal tiene la espalda y el culo bien marcado. Una vez tumbada se
abre de piernas, exponiéndose frente a mí. Observo lo que tengo delante, el clítoris está
muy bien descapuchado. Levanto la cola de gato, tocan tres azotes. Y sigo el
procedimiento establecido, ¡zas! Suave. No hay reacción. ¡Zas! Medio. Se
sobresalta, señal de que el clítoris está muy sensible. ¡Zas!
-
¡Ai!
– se le escapa, ha sido incontrolable, al igual que el cierre de piernas.
-
No,
no. Abre las piernas. Ya queda poco, lo estás haciendo muy, muy bien.
Sin rechistar, cierra los ojos, respira profundamente y abre las piernas y
me muestra el coño. Está húmedo, se le ven los fluidos. No hace falta tocar
para comprobar. Solo queda comprobar cómo reacciona al jugar con su clítoris y
después terminar con las tetas. Está muy sensible y puede que diga rápidamente
rojo. Pero no puede dar marcha atrás, debe terminar este apartado. Así lo hace,
empieza a jugar con el clítoris de la inspirante que tiene delante, lo hace
siguiendo el protocolo de siempre, el que ha establecido en un primer
momento, como le ha funcionado decide no
cambiarlo. Va jugando de suave a intenso. De lento a rápido. Observa el
comportamiento corporal de la puta que tiene delante. Observa cómo se agarra
con fuerza de la camilla, intenta controlar lo que le está subiendo, pero no
puede.
-
Rojo
– dice llorando. Siente que me ha defraudado. – Lo siento.
-
Tranquila,
no pasa nada. Es muy normal tu reacción. Recupera la respiración y procedemos.
Ella sigue tumbada, observo como se va calmando, como va recuperando la
respiración, aunque la estoy observando ella no se pone nerviosa, es capaz de
aguantar la mirada penétrate de una desconocida y eso también es muy bueno. Se
dirige a sus tetas, concretamente a sus pezones y empieza a pellizcarlos:
suave, medio, alta, muy alta e intenso. Elsa, solo gime y cada vez más, según
la presión de los pellizcos. Se la queda mirando y Elsa interpreta muy bien su
mirada, le ofrece las tetas. Belladona levanta la mano y azota dos veces en
cada una. Observa y anota.
-
Muchas
gracias Elsa, ya te llamaremos. Ya sabes lo que debes hacer.
-
Si,
ahora mismo lo hago.
Coge el test y sale de la habitación, sonriente y muy orgullosa. Tiene un
buen lote en la mercancía. Se sienta en el despacho y sin ningún tipo de duda
anota el resultado final.
NOMBRE ASPIRANTE
|
Elsa
|
|
TETAS
|
Tolerancia azotes
|
alta
|
Tolerancia pellizcos
|
Muy alta
|
|
Resistencia pinzas
|
Muy
alta.
|
|
COÑO
|
Tolerancia 3 azotes
|
SUAVE: alta
MEDIO: alta
INTENSO:
media
|
Comprobación humedad
|
Muy
buena. Muy buena lubricación.
|
|
Observación clítoris
|
Muy
sensible. Capacidad media de aguantar los orgasmos.
|
|
CULO
|
Tolerancia 4 azotes
|
SAUVE: alta
MEDIO: alta
FUERTE: alta
INTENSO:
alta
|
Numero de dedos en ano
|
Tres.
|
|
ESPALDA
|
Tolerancia 5 azotes
|
Alta.
Azotes realizados con fusta.
|
BOCA
|
Comprobación técnica
|
Muy
buena.
|
ORDENES
|
Reacción a ellas
|
Muy obediente.
|
VALORACIÓN FINAL
|
Apta
|
Seguimos adelante, ya queda poco.
-
La
siguiente.
Entra Arandel, nerviosa, mordiéndose la uñas, mirando todos los rincones de
la habitación. Parece que no sabe muy bien ni cómo actuar ni qué hacer. Para
empezar, según su ficha tiene poca experiencia, con un Amo, por lo tanto no se
presenta libremente. Su Amo quiere que obtenga más experiencia.
-
Ho,
ho, hola…soy…soy…
-
Sé
quién eres. Nadie te ha dado permiso para hablar.
-
Perdón,
estoy muy nerviosa – dice tímidamente.
-
¿Qué
te acabo de decir, nada de hablar sin permiso? Desnúdate y ponte de pie frente
la pared.
Sus manos tiemblan, esta como un flan, no sabe por dónde empezar. Belladona
empieza a impacientarse.
-
Venga
chica, relájate ya de una vez y desnúdate. Voy hacerte una pregunta. ¿Quieres
estar aquí? Responde.
-
Tengo
que estar aquí, sino quiero ser castigada por mi Amo.
-
Solo
tendrás una oportunidad, desnúdate rápido y empecemos.
Parece que reacciona, sus manos empiezan a desnudarse con determinación,
mantiene la cabeza alta, mirando fijamente a los ojos de belladona. Una vez
desnuda se da la vuelta lentamente hacia la pared. Belladona le tiende una mano
con dos pinzas. No le dice nada. Espera a que reaccione. Pero arandel mira las
pinzas fijamente, mueve la mano temblorosamente hacia delante y hacia detrás.
Belladona le va acercando la mano lentamente. Hasta que arandel reacciona y las
coge. Mira a belladona y esta asiente. Por deducción y con miedo, arandel
intenta colocar la primera pinza. Le tiembla la mano, coge con fuerza su teta y
no deja de mirar la pinza.
-
Venga
puta, tú puedes. Colócate las pinzas, ya. – le dice severamente.
Respira profundamente, acerca su mano en el primer pezón y… ¡clic! Coloca
la pinza. Empieza a temblar, su respiración se agita. Belladona le acerca la
otra. No sabe si será capaz. Coge la pinza y… ¡clic!
-
Au,
duele, no…no…
-
Ssshhh,
respira poco a poco, cuando no puedas más di la palabra de seguridad, rojo.
-
De
acuerdo. Pero…
-
Cállate
y respira. Date la vuelta.
Belladona seguir el mismo procedimiento anterior, seguirá con la espalda.
En la mano tiene la cola de gato, le cuenta que serán 5 azotes en total. Cuando
se dispone a dar el primer azote, Arandel se aparta. Belladona le dice que eso
no lo puede hacer, que se esté quieta.
-
Es tu
ultima oportunidad
Vuelve a levantar el gato y… ¡zas!
-
Rojo
– chilla arandel.
-
Vale,
quítate las pinzas. Ya hemos terminado. Vístete.
Agarra su test y delante de ella lo hace añicos. Mientras arandel abre la
puerta…
-
La
siguiente, por favor – dice enfadada.
NOMBRE ASPIRANTE
|
Arandel
|
|
TETAS
|
Tolerancia
azotes
|
|
Tolerancia
pellizcos
|
|
|
Resistencia
pinzas
|
Baja
|
|
COÑO
|
Tolerancia
3 azotes
|
SUAVE:
MEDIO:
INTENSO:
|
Comprobación
humedad
|
|
|
Observación
clítoris
|
|
|
CULO
|
Tolerancia
4 azotes
|
SAUVE:
MEDIO:
FUERTE:
INTENSO:
|
Numero
de dedos en ano
|
|
|
ESPALDA
|
Tolerancia
5 azotes
|
|
BOCA
|
Comprobación
técnica
|
|
ORDENES
|
Reacción
a ellas
|
Lenta,
pero obediente.
|
VALORACIÓN FINAL
|
No apta
|
Sabe que tendrá que buscar entre las fichas, para substituir a Arandel,
pero no debe parar. La puerta se abre y entra pisando fuerte Saphira. Ella se
muestra segura, ataviada con un sexy conjunto de ropa interior y unas
pezoneras. Es bajita pero muy bonita. Entra, se pone frente a belladona, ella
le hace entrega de las pinzas. Saphira sabe cómo funciona la cosa, tiene
experiencia y se presenta libremente, eso es señal de que quiere estar allí.
Alarga la mano, agarra las pinzas, se quita las pezoneras y sensualmente se
coloca las pinzas. Hace una pequeña mueca de dolor, por no se queja.
-
Muy
bien, vamos a proseguir, pone de pie de cara a la pared.
-
De
acuerdo.
-
Ya
sabes, rojo, en cuanto no puedas más.
No dice nada, más, se gira y se prepara para ser azotada. Como tiene
experiencia, belladona decide que el primer azote será más fuerte de lo normal.
Levanta el gato y… ¡zas! Saphira no se inmuta, así que belladona prosigue. ¡Zas!
¡Zas! Dos azotes seguidos y bien fuertes. La espalda le está quedando roja y
ella gime. Le quedan dos azotes, estos serán más fuertes que los tres primeros
y seguidos, sin pausa entre ellos. ¡Zas! ¡Zas!, han sonado fuerte, Saphira se
ha querido apartar un poco, estos dos últimos le han dolido pero ha aguantado
como una campeona. Belladona le indica que se tumbe boca arriba en la camilla. Saphira,
se quita las bragas y se tumba en ella, se abre de primeras y con la ayuda de
sus dedos se abre bien el coño, exponiéndose y enseñando todas sus intimidades.
Esa es muy buena señal. Y belladona, vuelve a coger el instrumento de azotar,
esta vez es la pala. Pero antes de empezar a azotar, observa atentamente como
esta de húmedo el coño y le gusta lo que ve, con las pinzas y los azotes en la
espalda, ella se ha humedecido muchísimo. El clítoris también está bastante
descapuchado, belladona levanta la pala y… ¡zas! Primer azote, nada. ¡Zas!
Segundo azote, esta vez ella se sobresalta un poco, pero no hace ningún movimiento
de cerrar las piernas, respiración agitada y gimiendo, quiere más. Así que no
la hace esperar y… ¡Zas! Ultimo azote muy intenso. Grita tímidamente, pero no
se ha movido, resiste muy bien los azotes. Con fuerza le abre más las piernas y
empieza a observar el clítoris de la puta que tiene adelante, siguiendo el
procedimiento de las chicas anteriores, dando las mismas pautas de actuación.
Se queda gratamente sorprendida por las reacciones de saphira, no protesta y
cumple a raja tabla las órdenes. Cuando empieza a jugar con su clítoris, a los
pocos segundos ella se tensa. Está muy sensible y está muy cargada. Levanta la
mano, cómo pidiendo permiso para hablar.
-
Dime.
-
No sé
si podré aguantar mucho más.
-
Aguantar
lo que puedas. Y más.
-
De
acuerdo.
Saphira se tensa, no puede controlar los movimientos de sus piernas ni del
resto de su cuerpo. Son movimientos involuntarios, el orgasmo está muy cerca.
-
Rojo
– chilla
Belladona para. El clítoris de saphira palpita frente a ella, ha estado muy
al límite. Vaya su nivel de excitación es muy elevado y muy fácil de activar.
De momento no se queja de las pinzas. Así que le hace entrega del consolador
grande para que le demuestre su técnica. Al principio se muestra un poco
tímida, pero cuando se libera…muestra una gran técnica. Sabe lo que debe hacer
y vaya como lo hace. Se muestra segura aunque respira agitadamente, está
cargada de placer, intenta fregarse con cualquier cosa para darse placer.
-
Quietecita
puta. No puedes correrte.
-
Perdona.
-
¿Aguantas
más las pinzas?
-
No,
mucho. Empiezan a dolerme.
-
Bien,
vamos a ver. ¿quieres que te las quite?
-
Si,
por favor.
Decide no hacerla sufrir más y con mucho cuidado le quita las pinzas.
Respira aliviada. Y con una simple señal de belladona, se da la vuelta,
mostrando su culo grande pero un poco fofo. Una maravillosa superficie para
azotar. Con la pala en la mano las dos
saben lo que pasara a continuación. Así que no hace falta decir nada. Saphira
coge con fuerza la pala y… ¡zas! Le da suavemente, es como si no lo hubiera
notado, porque no se mueve ni se queja, ni gime. Así que no para, no le deja un
tiempo. Vuelve a levantar la mano y… ¡zas! Este más que medio, ha sido un medio
alto. En esta ocasión Saphira se queja un poco, pero no se ha movido ni un
centímetro, sabe cómo debe comportarse. Deja que la zona se calme un poco, pero
no deja pasar mucho rato, vuelve a levantar la mano y… ¡zas! Azota fuerte.
-
ROJO.
Señal de que el siguiente no lo resistirá. Es en este momento en el cual
duda un poco, o ella ha sido poco azotada o belladona tiene más fuerza que su
Amo, y eso no lo cree.
-
Masajéate
un poco la zona.
Mientras ella relaja un poco la zona azotada, belladona se prepara, se pone
el guante de látex y lo lubrica para facilitar la entrada de sus dedos en el
culo de ella.
-
Bien,
abre bien ese culo.
Saphira hace lo que le han ordenado. Y belladona introduce su primer dedo
sin ningún tipo de compasión. Ella se queja, pero no se mueve. Saphira saca el
primer dedo y suavemente empieza a introducir dos dedos. Nota como saphira se
va abriendo, esta estrecha y empieza a palpitar. Le gusta, disfruta, porque
ella hace fuerza para sentir más profundamente los dedos. Así que belladona
saca rápidamente los dedos y sin ningún descanso introduce tres dedos, que
entran sin ningún tipo de problema.
-
¿Cuántos
dedos entran normalmente?
-
4
Así que decide no perder el tiempo y comprobar como acepta cinco dedos.
Pero cuando está a punto de entrar el quito dedo… saphira empieza a quejarse. Y
belladona no será la que logre colar ese quito dedo. Así que los saca.
-
Muy
bien esclava. Ponte de pie y ofréceme las tetas.
Belladona coge los pezones de saphira y empieza a estrujarlos. De menos a
más observando como reacción saphira entre sus dedos. Cuando los dedos de
belladona empiezan a dolerle de la presión que hace y ve que ella no reacciona.
Los suelta sin ningún tipo de miramientos. Están rojos como un tomate.
-
Enséñame
como te pellizcas tú.
Empieza a auto pellizcarse, no lo hace mucho más fuerte que belladona, pero
los gira hacia un lado y hacia otro. Belladona observa sus reacciones, su cara
es de placer, mueve su cadera buscando alguna cosa con la que frotarse, pero no
hay nada cerca. Está muy caliente.
-
Vale,
para. Vamos con la última prueba.
Y le enseña la fusta. La cara de saphira es de susto, pero no cambia de
opinión. Son cuatro azotes. Los dos primeros son suaves para ver cómo reacciona
y cómo tolera la fusta. Se ha mesclado un quejido con un gemido. Así que vuelve
a levantar la fusta y… ¡Zas! Azote intenso en una de las tetas. Saphira grita
fuerte. Pero asiente con la cabeza, quiere el otro azote y no será belladona
quien se lo niegue. Así que… ¡Zas!
-
Muchas
gracias, ya puedes vestirte y recoger. Ya te llamaremos.
Abre la puerta, respira aliviada y se va, dejando a saphira sola en la
habitación. Se dirige a su despacho en busca de otra candidata, solo queda una
en la sala de espera y debe de encontrar seis. Ya tiene a cuatro de seis.
NOMBRE ASPIRANTE
|
Saphira
|
|
TETAS
|
Tolerancia
azotes
|
Con la
fusta alta
|
Tolerancia
pellizcos
|
Muy alta
|
|
Resistencia
pinzas
|
Media
|
|
COÑO
|
Tolerancia
3 azotes
|
SUAVE: alta
MEDIO: alta
INTENSO:
alta
|
Comprobación
humedad
|
Muy
buena
|
|
Observación
clítoris
|
Grande,
rosado, muy sensible. Fácil de activar.
|
|
CULO
|
Tolerancia
4 azotes
|
SAUVE: alta
MEDIO: alta
FUERTE: alta
INTENSO:
no realizado
|
Numero
de dedos en ano
|
4
|
|
ESPALDA
|
Tolerancia
5 azotes
|
ALTA
|
BOCA
|
Comprobación
técnica
|
Muy
buena.
|
ORDENES
|
Reacción
a ellas
|
Muy
obediente. Reacciona rápido.
|
VALORACIÓN FINAL
|
Apta
|
Bien, vamos a por la penúltima, ya ha llamado a la substituya y viene de
camino. Las órdenes han sido claras, tiene 20 minutos para llegar si quiere
participar en el acontecimiento. Espera que cumpla.
-
Bueno,
vamos allá Arya.
Ha entrado dudando un poco, pero no transmite miedo. Es novata, no ha
tenido ningún tipo de contacto con ese mundo y ha elegido la parte más difícil
para iniciarse. Así que belladona decide explicarle como funcionara el test y
que debe hacer en cualquier caso, si quiere parar.
-
De
acuerdo.
Acata bien las órdenes. Y aunque duda un poco está segura de lo que quiere
hacer. Belladona le indica que se desnuda, que agarre las pinzas y se las
coloque en sus pezones. Después que se ponga de cara a la pared. Una vez se ha
colocado las pinzas empieza hacer ruidos y respirar profundamente.
-
Ai,
ai, ufff…ufff…
-
¿Puedes
seguir?
-
Si, si
puedo.
Buena reacción, así que belladona sigue para delante. En la mano tiene el
gato. Lo levanta y empieza a azotar la espalda de Arya. Realiza cinco azotes,
de menos a más para observar cómo reacciona. Es buena, no se aparta, se
mantiene firme y los dos últimos azotes no han sido precisamente suaves, han
sido bastante intensos. Y ha resistido como una campeona. Belladona empieza a
ver una gran esclava a la venta. Una gran mercancía.
-
Rojo
-
¿Las
pinzas?
-
Sí,
no puedo más.
-
De
acuerdo, quítatelas. Después muéstrame lo que sabes hacer con tu boca.
Coge el consolador con las manos temblorosas, mira el juguete de arriba abajo, según su ficha es virgen en
todos sus agujeros. La invita a que siga adelante y muy lentamente empieza a
jugar con el consolador. Pone todo su empeño. Cierra los ojos y se deja llevar.
Lo que al principio parecía un desastre, poco a poco va mejorando. Por su cara
se ve que está disfrutando y le gusta lo que está viviendo. No sabe cuándo debe
para y empieza estar un poco agobiada. Así que...
-
Bien,
muy bien. ofréceme tus tetas.
Se da la vuelta, y se queda con los brazos a un lado. Belladona se acerca a
ella, le agarra sus manos y se las pone en sus tetas.
-
Así,
aguántalas bien fuertes. Eso es mostrar y ofrecer. Primero pellizcaré, luego
azotaré. ¿Sabes lo que debes decir, si no puedes más?
-
Si,
la palabra es rojo.
-
Bien,
pues seguimos.
Belladona acerca los dedos en los pezones de Arya. Y empieza a presionar, a
girar y a dar golpecitos. Cada vez están más rosados y más erectos. Arya tiene
los ojos cerrados, está concentrada y se va animando, susurra palabras de
ánimo. Belladona aumenta la presión todo lo que puede y más. Empiezan a dolerle
los dedos y poco a poco va aflojando. Bien. Muy bien. En esta parte tiene la
tolerancia muy alta.
Belladona coge el gato en la mano. Serán cuatro azotes. Dos medios suaves y
dos fuertes. Arya tiene los ojos cerrados y apretados, respira profunda y
lentamente. Belladona levanta la mano y… ¡zas! Espera para ver su reacción al
primer azote.
-
Au –
dice con voz muy baja.
-
Abre
los ojos, esclava.
Y lo hace sin rechistar. Belladona vuelve a levantar la mano y… ¡zas! Azota
la otra teta. Arya da un paso hacia atrás. Empieza a derramar alguna lágrima.
Pero no dice la palabra. Así que belladona, vuelve azotar, y esta vez muy
fuerte la otra teta. Arya se mantiene firme en su sitio y con los ojos bien
abiertos. Deja salir el aire. Belladona procede con el último azote. Buena
reacción. Su cara es de dolor, pero no se ha movido ni un ápice.
-
Túmbate
en la camilla y muéstrate.
Arya se tumba en ella y abre las piernas. Belladona se acerca y le indica
cómo debe abrirse el coño. Y Arya la obedece, sigue todas sus indicaciones
mientras belladona le enseña el gato y la pala. Le da a entender que elija y
Arya mira fijamente la pala. Buena elección, aunque puede que un poco
equivocada. Es valiente. Eso también le gusta a belladona. Así que deja el gato
y coge la pala con su mano buena. La levanta y da el primer azote. Suave. Y es
extremadamente suave, lo ha hecho para que ella se acomode a la situación y sea
consciente de lo que le viene. Así que procede con el segundo azote. Este es un
poco más fuerte e involuntariamente Arya cierra los ojos y hace la intención de
cerrar las piernas. Pero no lo hace, las vuelve abrir. Belladona deja que la
zona respire un poco, pero no espera mucho tiempo, ya queda poco para los
veinte minutos y quiere escuchar la puerta. Vuelve a levantar la pala y… ¡Zas!
Azote fuerte.
-
Aiiii,
¡Rojo! – chilla desesperadamente.
Belladona le vuelve abrir las piernas, porque las ha cerrado en este último
azote. Y aprovecha para observar el clítoris y comprobar su humedad. Queda muy
satisfecha con lo que ve. Y sin decir ni esperar nada empieza a jugar con el
clítoris de Arya. Siguiendo el procedimiento establecido. Ella se retuerce en
la camilla, gime, respira agitadamente, se tensa, mueve la cabeza de un lado a
otra, está nerviosa, no sabe cómo debe actuar. Quiere decir la palabra pero
también quiere liberarse. Belladona no dice nada.
-
ROJO.
-
Muy
bien. Lo estás haciendo muy bien. Date la vuelta.
Se da la vuelta y deja al alcance de belladona su trasero pequeño y
respingón. Esta zona solo la debe azotar. Mientras se prepara con el gato,
escucha la puerta y mira el reloj. Muy bien, ha llegado puntual la nueva
inspirante. Esa la alegra mucho. Y con el gato en la mano empieza a azotarla,
son cuatro azotes. Primero el suave. Ella no se mueve, ni se queja. Esta
tolerancia es alta. Seguidamente y en la otra nalga… ¡zas! Un azote medio, esta
vez Arya se sobre salta y deja salir un pequeño grito. Vuelve a respirar
profundamente, aprieta con fuerza las manos en la camilla, sabe que ahora viene
uno de los buenos. ¡Zas! Ha sido fuerte, grita desesperadamente y llora, llora
desconsoladamente. Le ha dolido, pero no dice nada. Pero cuando se dispone a
realizar el último azote…
-
Rojo.
-
Masajéate
la zona, lo has hecho muy bien. Relájate, vístete y limpia la habitación. Ya te
llamaremos.
Belladona sale de la habitación y feliz se va a su despacho. Mientras sale
mira a la nueva inspirante. Y le gusta lo que ve. Cree que ya está a punto de
terminar con la tría.
NOMBRE ASPIRANTE
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Arya
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TETAS
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Tolerancia
azotes
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Buena.
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Tolerancia
pellizcos
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Muy alta
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Resistencia
pinzas
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Muy baja
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COÑO
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Tolerancia
3 azotes
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SUAVE: alta
MEDIO: media/alta
INTENSO:
baja
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Comprobación
humedad
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Muy alta
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Observación
clítoris
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Pequeño,
rosado y muy sensible. Resistencia alta.
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CULO
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Tolerancia
4 azotes
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SAUVE: alta
MEDIO: media
FUERTE: media/alta
INTENSO:
nulo
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Numero
de dedos en ano
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A
desvirgar
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ESPALDA
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Tolerancia
5 azotes
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Alta
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BOCA
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Comprobación
técnica
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Buena.
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ORDENES
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Reacción
a ellas
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Muy
buena reacción.
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VALORACIÓN FINAL
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Apta
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Mientras vuelve a la habitación mira de soslayo a la nueva inspirante.
Respira aliviada porque tiene experiencia, eso pone las cosas más fáciles y
rápidas, o eso espera y desea. Se presenta libremente, eso solo puede
significar que actualmente no tiene Amo.
-
La
siguiente.
Sandy entre cabizbaja con un buen vestido que le deja los pechos al aire
libre y deja ver sus intimidades, el culo y el coño. Se pone frente a
belladona, con las manos a los lados y mirando hacia abajo. No dice ni hace
nada. Buena actitud.
-
Bien,
ya sabes cómo va esto. Así que si en cualquier momento necesitas parar tu
palabra de seguridad es Rojo. ¿Lo has entendido? Puedes contestar.
-
Sí,
todo entendido.
-
Pues
vamos allá. Ponte las pinzas y colócate frente la pared, cara ella. ¿De
acuerdo?
-
Sí.
Sin levantar la vista se dirige al sitio que le han indicado. No es
necesario desnudarse, las partes necesarias quedan accesibles y a la vista.
Agarra con determinación las pinzas y sin dudar y sin ningún tipo de cuidado se
las coloca. Su cara sigue siendo una pared en blanco, no se inmuta, ni se
queja. Antes de empezar con los azotes belladona le da a elegir el instrumento,
sobre la mesa hay tres: cola, fusta y látigo.
-
Señala
con que quieres ser azotada.
Sin levantar la vista señala el látigo. Buena elección piensa belladona, lo
agarra con fuerza y sin ninguna pizca de duda… ¡zas! ¡Zas! ¡Zas! Es a partir
del tercero que Sandy empieza a reaccionar, agarra con fuerza la pared, gime y
se queja por lo bajini. Pero no dice nada, así que decide continuar. ¡Zas!
¡Zas!. Espalda bien roja y ella aguanta.
-
Date
la vuelta. Muéstrame lo que sabes hacer.
Sandy coge el consolador, es grande y ancho. Empieza a metérselo en la boca
y lentamente va entrando todo, entero hasta el
fondo. Acto seguido va mostrando sus habilidades, lo lame, lo chupa, se
la mete y se la saca. Y ella empieza a gemir, empieza a moverse, le gusta y se
está excitando. Se está volviendo loca y eso le gusta mucho a belladona.
-
Fantástico
esclava. Túmbate en la camilla y muéstrate.
Se levanta la falda, se tumba en la camilla, se abre las piernas y con la
ayuda de sus manos se abre el coño y se muestra tranquilamente y sonriente.
Entonces belladona coge la pala y la azota tres veces. Suave, medio e intenso.
En ninguno de los tres azotes Sandy hace ningún movimiento de cerrar las
piernas, solo gime y se le escapa un…más,
por favor.
-
Tú no
eres nadie para pedir. Solo yo te daré lo que te merezcas.
¡Zas! ¡Zas! La azota dos veces con la mano, tan fuerte que le duele a ella,
en las tetas que están sensibles por las pinzas. Sandy empieza a llorar.
-
Lo
siento. No volverá ocurrir – dice entre sollozos.
-
Así
me gusta, que hayas aprendido la lección.
Automáticamente mientras observa el grado de humedad aprovecha para jugar
con su clítoris. Golpecitos, círculos grandes y pequeños. Pellizcos fuertes y
flojos. Le sopla suavemente. La va provocando, busca su orgasmo, busca su
límite. En cierto modo Sandy sabe que la está castigando un poco más por su
petición. Ella se agarra con fuerza en la camilla, se mueve, se retuerce, gime
locamente. Belladona aumenta el ritmo de las caricias y Sandy se vuelve un poco
más loca, no puede más. Intenta aguantar todo lo que puede y más, se tensa y su
coño empieza a palpitar y cuando ya está a punto de dejarse ir…
-
Rojo,
rojo, rojo.
Belladona para, sigue a raja tabla las indicaciones que le ha dado a ella.
Así que para y vuelve a mirar la humedad del coño.
Lleva veinte minutos con las pinzas. La dejo respirar un poco, para que se
calme. Belladona la observa fijamente, para ver si se pone nerviosa cuando es
observada y nadie hace nada. Ella no se mueve, sigue con la respiración agitada
por lo último vivido, pero poco a poco se va calmando y va recuperando el ritmo
cardíaco. Belladona le quita las pinzas y ella una pequeña mueca de dolor
acompañada de un suspiro largo.
-
Date
la vuelta y muéstrame el culo.
Sandy se gira, y se muestra, se arrodilla dejando el culo elevado y más
accesible, con las manos se abre y muestra el ano. Buen culo, grande, rosado y
respingón. Belladona agarra la fusta. Y empieza a azotar. Suave, no se mueve.
Medio, tampoco reacciona. Fuerte, grita suavemente y empieza a sollozar. Pero
no se mueve, esta inmóvil. Finalmente…el intenso.
-
Au,
buffff – se queja y deja salir el aire acumulado.
-
Lo
estás haciendo muy bien. Voy a seguir. ¿Recuerdas la palabra de seguridad?
-
La
recuerdo.
Belladona se pone un guante y lo lubrica. Directamente le introduce tres
dedos lentamente. Y una vez dentro los empieza a mover despacio y en círculos
de pequeños a grandes. Sandy disfruta, le gusta. Así que belladona saca los
tres dedos y sin esperar introduce un cuarto. Entran bien, deslizan sin ninguna
dificultad y ella los acepta fácilmente. Empieza a moverse a gemir con locura.
Y belladona para. Le saca los dedos. Y le ordena que se levante y le ofrezca
las tetas. Sandy obedece sin rechistar, se coge las tetas por debajo y se las
muestra y ofrece. Belladona se acerca a ella y con los dedos empieza a
pellizcar los pezones, primero suavemente y poco a poco va aumentando la
presión. Hasta que Sandy empieza hacer muecas de dolor y hasta el límite de sus
fuerzas. Acto seguido agarra la cola de gato, lo levanta con firmeza y mirando
a Sandy fijamente en los ojos… ¡Zas! Lo
azota por primera vez, son cuatro azotes en total, la intensidad es entre media
y alta. Sandy no se queja, ni se mueve. Disfruta de los azotes, gime de placer.
Está muy cargada y le gustaría poder explotar. Se siente orgullosa al igual que
belladona, otra gran candidata que formara parte de la mercancía de su Amo.
-
Muchas
gracias, ya puedes arreglarte y recoger la habitación. Ya te llamaré.
Belladona no dice nada más y se dirige hacia la puerta. Sale de la
habitación muy contenta por el trabajo bien hecho y se dirige a su despacho. Se
sienta en la butaca, observa el último test realizado, coge su bolígrafo y
anota el resultado final. Acto seguido coge el teléfono y llama a su Amo.
-
Amo…
test realizados y con mucho éxito. Ya tenemos a las seis candidatas.
-
Enhorabuena,
llévame los resultados quiero ver los resultados.
-
Ahora
mismo, no tardare. Hasta ahora.
-
Hasta
ahora, perrita. Buen trabajo.
Belladona se levanta, coge las hojas y sale hacia el punto de encuentro con
su Amo. Está orgullosa y feliz.
NOMBRE ASPIRANTE
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Sandy
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TETAS
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Tolerancia azotes
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Muy
alta.
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Tolerancia pellizcos
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Muy alta
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Resistencia pinzas
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Muy
buena.
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COÑO
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Tolerancia 3 azotes
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SUAVE: muy alta
MEDIO: muy alta
INTENSO:
muy alta
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Comprobación humedad
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Muy
alta. Chorreando.
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Observación clítoris
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Pequeño,
respingón. Muy sensible y buena resistencia al control del orgasmo.
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CULO
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Tolerancia 4 azotes
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SAUVE: muy alta
MEDIO: muy alta
FUERTE: muy alta
INTENSO:
alta
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Numero de dedos en ano
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4
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ESPALDA
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Tolerancia 5 azotes
|
Muy
alta.
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BOCA
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Comprobación técnica
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Muy
buena.
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ORDENES
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Reacción a ellas
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Muy
buena reacción. Acata sin rechistar.
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VALORACIÓN FINAL
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Apta
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